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Nuevas reglas para las escuelas | 
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| La escuela Bhandari Modern Public School, ubicada en la zona rural de Brahmpuri, es parte del creciente movimiento para proporcionarles educaci贸n privada a los m谩s pobres en India. No existen cifras confiables, pero un nuevo reporte del Instituto de India, un comit茅 asesor, descubri贸 que el 65% de los ni帽os que viven en Patna, una ciudad bastante representativa, van a escuelas privadas. Y un 70% de los padres y representantes que env铆an a sus hijos a escuelas p煤blicas los enviar铆an a escuelas privadas si se pudieran costear las modestas mensualidades desde 50 hasta 500 rupias.
Las instalaciones de la escuela son muy b谩sicas, pero las escuelas privadas econ贸micas son disciplinadas y a menudo ense帽an el idioma ingl茅s. La escuela del Dr. Bhandari, quien es due帽o y director al mismo tiempo, es parte de un experimento con cupones dirigido por un comit茅 asesor local: el Centro para la Sociedad Civil escoge a unas 400 chicas al azar y les da un cup贸n para lo gasten en la escuela privada de su preferencia. Los resultados son alentadores: 鈥渓as chicas cup贸n鈥 leen y realizan operaciones matem谩ticas mejor que sus contrapartes en las escuelas del estado, y adem谩s tienen mayores aspiraciones. Ellas adem谩s obtienen m谩s apoyo por parte de sus familias.
Eso de que los padres en condiciones de pobreza pagar谩n por algo que el estado suministra de forma gratuita dice mucho. Las escuelas del estado en India les pagan a sus maestros mucho m谩s que las privadas, aunque las condiciones de 茅stas sean mucho peores. Las encuestas sugieren que un cuarto o m谩s de los maestros del gobierno se ausentan en un determinado momento. Los sindicatos previenen que las autoridades reprendan a los maestros holgazanes o recompensen a los que son buenos.
La voluntad que tienen los padres de escasos recursos en pagar tambi茅n es una se帽al de algo m谩s positivo: la pasi贸n com煤n de los hind煤s por la educaci贸n. Las zonas rurales como Brahmpuri se encuentran llenas de anuncios publicitarios con escuelas de computaci贸n y de ingl茅s (los trabajadores que hablan ingl茅s fluido ganan un 34% m谩s que los que no lo hablan). Las empresas en India que dependen del ingenio humano naturalmente se encuentran ansiosas de nutrir a los cerebros locales. Compa帽铆as como Infosys han construido inmensas m谩quinas de entrenamiento que convierten a graduandos con promedios regulares en programadores de clase mundial. Y los empresarios sociales se encuentran produciendo experimentos interesantes: el f铆sico Sugata Mitra coloc贸 un computador en un hoyo de la pared de su oficina, el cual daba hacia un vecindario pobre, y descubri贸 que los ni帽os analfabetas se ense帽aban a s铆 mismos a navegar por la Internet. Los computadores de 鈥淗oyo en la Pared鈥 se encuentran ahora disponibles en cientos de sitios en todo el pa铆s.
Unos pocos gobiernos locales han intentado el sistema de los cupones. Uttarakhand, un estado situado al norte, les da cupones por un valor de 3.000 rupias al a帽o a hu茅rfanos y desertores de escuelas. Aunque muchos funcionarios hind煤s ven las escuelas privadas con suspicacia. Los empresarios de la educaci贸n deben obtener docenas de licencias y aprobar un sinf铆n de inspecciones por parte de inspectores hambrientos de soborno. Los servicios de salud tambi茅n son regulados, pero las reglas para las escuelas privadas (las cuales amenazan a un monopolio p煤blico) parecen dise帽adas para hacerlas desaparecer. La Ley de Educaci贸n de 2009 (vigente a partir del a帽o pr贸ximo) dicta el tama帽o m铆nimo que deben tener los patios de recreo de las escuelas y el nivel m铆nimo de salario que deben ganar los maestros.
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Este es el resumen del artículo "Nuevas reglas para las escuelas" publicado en Marzo 23, 2013 en la revista The Economist.
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