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Un club 谩vido de una nueva visi贸n



Revista: The Economist
Tema: Negocios en Europa
Fecha: Mayo 01, 2004
Para los primeros d铆as del mes de mayo se sumaron diez nuevos pa铆ses a la Uni贸n Europea. Lo que comenz贸 en 1951 como una organizaci贸n dedicada al acero y al carb贸n con seis naciones, ahora cuenta con veinticinco. La primera expansi贸n de la UE se dio en 1973 cuando Gran Breta帽a, Dinamarca e Irlanda se sumaron a los seis pa铆ses originales. En 1981 entr贸 Grecia; en 1986 Espa帽a y Portugal. Y en 1995 Suecia, Austria y Finlandia.

Este es un per铆odo de triunfo para el proyecto europeo, ya que supone la uni贸n de un continente forzado a mantenerse aparte por 45 a帽os a causa de la Cortina de Hierro. En muchos casos la membres铆a fue apoyada por un refer茅ndum y por mayor铆a. Rumania y Bulgaria esperan integrarse para el 2007. Croacia pronto ser谩 invitada a iniciar conversaciones. Macedonia aplic贸 hace poco y se le sumar谩n otras naciones de los Balcanes.

A pesar de esto, el humor por la EU es apenas de j煤bilo en muchas naciones, lo que obedece en gran medida al mal humor que reina en muchos europeos. Este sentimiento responde a la lentitud del crecimiento econ贸mico y a los altos niveles de desempleo en pa铆ses como: Alemania, Francia y Espa帽a. En el reciente sondeo de opini贸n, el 鈥渆urobar贸metro鈥, se encontr贸 que el respaldo para la UE en los pa铆ses miembros ha ca铆do por debajo del 50%, a diferencia del 70% de principios de los noventa. Uno de los problemas principales es el dinero, los pa铆ses que contribuyen en buena medida con la UE, como Alemania y Holanda, ahora temen que tendr谩n que aportar m谩s. El segundo obst谩culo es la migraci贸n. En toda la uni贸n, lo que m谩s han rese帽ado los medios es la llegada intempestiva de inmigrantes desde Europa central y oriental.

La atm贸sfera de disputa constante que parece rodear a la EU no ayuda. Entre tantos temas de conflicto, el borrador de constituci贸n para el organismo ha exacerbado las divisiones. El d煤o franco alem谩n que frecuentemente ha liderado Europa tambi茅n est谩 afectado. Y las nuevas naciones poco a poco se han contagiado y hasta han mostrado signos de desilusi贸n. No obstante, puede que este descontento de la Uni贸n Europea no importe tanto. Un club que ha durado medio siglo definitivamente no corre peligro de desintegrarse.

La agenda de la UE est谩 llena. Vienen las negociaciones sobre el borrador de la Constituci贸n y las correspondientes elecciones en los diferentes pa铆ses para aprobarla. Tambi茅n est谩 pendiente si se abren negociaciones con Turqu铆a y un acuerdo sobre el programa presupuestario en los pr贸ximos seis a帽os. El malestar combinado con la decisi贸n que se deba tomar en torno a estos asuntos puede ser explosivo, y los europeos tendr谩n que recordar los objetivos espec铆ficos para los cuales fue formada la organizaci贸n y, tal vez, despojarse de los recuerdos de los buenos tiempos cuando el colapso del comunismo ofrec铆a nuevos retos y oportunidades, como: una moneda 煤nica, fronteras abiertas para el turismo, cooperaci贸n en asuntos clave y una pol铆tica com煤n en asuntos de seguridad.

Lo que la UE deber铆a preocuparse en revitalizar es la econom铆a y retomar la meta planteada hace cuatro a帽os en Lisboa, la de hacer a esta coalici贸n 鈥渓a econom铆a m谩s competitiva del mundo鈥 para el 2010. Este objetivo ha fallado debido a que, precisamente, Lisboa ha puesto restricciones bajo el pretexto de proteger a los consumidores, en 谩reas como las finanzas. Luego pa铆ses como: Alemania, Francia e Italia, tienen sus propios programas. Francia est谩 a punto de develar planes para reformas en salud, Italia est谩 considerando recortes de impuestos y Alemania est谩 pensando en definir sus reformas en sistemas de pensiones. Pero, en general, en materia econ贸mica prevalece el c铆rculo vicioso: crecimiento lento que lleva a alto desempleo, lo cual hace que las reformas sean pol铆ticamente m谩s dif铆ciles. En este sentido podr铆an ser de ayuda las nuevas naciones, ya que no s贸lo crecen m谩s r谩pido que los miembros existentes sino que son m谩s liberales. En econom铆a, entonces, tal vez los miembros de la UE necesiten mostrar m谩s ambici贸n.





Este es el resumen del artículo "Un club 谩vido de una nueva visi贸n" publicado en Mayo 01, 2004 en la revista The Economist.

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