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¿Podrá la Canon seguir imprimiendo dinero?



Revista: Business Week
Tema: Empresas
Fecha: Septiembre 05, 2005
Autor(es): Ian Rowley, Hiroko Tashiro & Louise Lee
Es difícil pasar por alto la gigantesca estatua de Buda que supervisa a la planta Ami, de Canon Inc., en Ibaraki, al norte de Tokyo. Con 120 metros de altura, el Buda vigila el verde paisaje en el que está situada la fábrica. Pero para los trabajadores que ensamblan fotocopiadoras, la mirada de Buda no es nada en comparación con la de Hiroshi Ishii. Este es el gerente de la planta y está pendiente hasta de la más mínima señal de ineficiencia. “No importa qué tan pequeña sea, tenemos que identificar cualquier despilfarro y eliminarlo”, dice mientras observa a un trabajador que envuelve máquinas de copiar frescas.

Es posible que la pretensión de Ishii sea un poco obsesiva, pero ese es el tipo de pasión que ha convertido a Canon en una de las principales empresas de Japón. Ishii y sus colegas de Ami han desarrollado un sistema simple para hacer más eficientes las operaciones; por ejemplo, el uso de poleas para transportar los componentes, mesas de trabajo giratorias para que los trabajadores no se tengan que mover, todas las herramientas deben estar a 20 centímetros del trabajador, es decir, al alcance de la mano, etc.

El artífice de la eficiencia de Canon es el CEO Fujio Mitarai, quien llegó a su cargo actual hace diez años tras la muerte de su predecesor. Al principio, Mitarai tuvo que enfrentar una deuda de US$ 7,5 mil millones. Así que, en contra de la tradición de Canon, Mitarai decidió recortar los gastos, concentrarse solamente en los productos rentables (fotocopiadoras, impresoras y cámaras), y cerrar siete departamentos, entre estos: computadoras personales, máquinas de escribir y pantallas de cristal líquido. Así pues, en los últimos cinco años, Canon se ha ahorrado un promedio de US$ 800 millones anuales.

La fijación de Mitarai por los recortes y la prudencia financiera ha rendido sus frutos. El 27 de julio, Canon anunció que su margen operativo en el primer semestre había sido de 15,4%, es decir, el doble que la mayoría de las compañías rivales. Canon espera que este año sus ganancias aumenten en 6,9%, es decir, US$ 3,28 mil millones; y sus ventas, en 6,1%, es decir, 32,9 mil millones. Sin embargo, Canon tiene aún por qué preocuparse. Dado que los precios de las cámaras digitales están disminuyendo, es improbable que Canon logre aumentar sus ganancias como en los últimos cinco años. Por otra parte, han aparecido nuevos rivales en el área de impresoras y fotocopiadoras, que constituye 65% de las ventas de Canon.




Este es el resumen del artículo "¿Podrá la Canon seguir imprimiendo dinero?" publicado en Septiembre 05, 2005 en la revista Business Week.

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