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Mejores formas de colaborar | 
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| La mayorÃa de la gente estarÃa de acuerdo en que la tecnologÃa de los computadores puede jugar un valioso rol en ayudar a los trabajadores a colaborar. Aunque ellos además estarÃan de acuerdo en que el correo electrónico, el ejemplo más ampliamente utilizado de tal tecnologÃa colaboradora, es menos que idealmente apropiado para la tarea. Basado en protocolos que fueron creados mucho antes de que la Internet tomara su forma actual, el correo electrónico continúa prosperando por dos razones. Es omnipresente: su dirección de correo, siendo única, funciona como el equivalente a su nombre, dirección postal y pasaporte en Internet, debido a que es comúnmente utilizado para entrar a los sitios web. Y es un ejemplo clásico de una herramienta lo “suficientemente buenaâ€. Le permite a las personas enviar mensajes a individuos o grupos, sostener discusiones en lÃnea e intercambiar documentos y otros archivos.
Pero una discusión vÃa correo electrónico entre varias personas puede rápidamente llenarle las bandejas de entrada de los participantes con una gran cantidad de mensajes, haciendo que el argumento sea difÃcil de entender.
Otras herramientas de colaboración han aparecido en los años recientes –incluyendo la mensajerÃa instantánea, blogs, wikis (páginas web que los usuarios pueden editar), redes sociales como Facebook y MySpace, aplicaciones web y servicio de micro-blogging como Twitter– pero ninguna se las ha ingeniado para destronar al correo electrónico. En efecto, muchos de estos servicios dependen del correo como un mecanismo principal de señalización. Cuando alguien publica un comentario en su blog, le envÃa un mensaje en Facebook o comienza a seguirle en Twitter, ¿cómo se entera de ello? Usted recibe un correo electrónico automatizado. Como consecuencia, la gente comúnmente utiliza una combinación de mensajerÃa variada y herramientas de colaboración, cada una con sus propias fortalezas y debilidades, tanto en sus vidas personales como empresariales.
Aunque sea extraño, los protocolos rÃgidos del correo electrónico hacen difÃcil la innovación de la bandeja de entrada. ¿Qué tal si se le hiciera una transformación al correo electrónico? Esa fue la pregunta que se hicieron a sà mismos dos ingenieros de Google en 2004. Su respuesta, llamada Google Wave, fue revelada en mayo 2009 y está ahora siendo probada por miles de usuarios a nivel mundial. Ésta le permite a la gente colaborar en discusiones compartidas, o “wavesâ€, las cuales pueden englobar muchas formas de interacción: mensajerÃa, notas, comentarios, colaboraciones o documentos compartidos y asà sucesivamente. Los usuarios pueden mover una lámina para “repetir†un wave y asà ver como alcanzó su forma actual.
Aunque sea impresionante, ¿puede Wave realmente tener las esperanzas de desafiar la supremacÃa del correo electrónico? Uno de sus creadores piensa que sà al imitar una de las fortalezas del correo electrónico y evitar una de sus debilidades. Los protocolos utilizados para codificar y transferir los mensajes de correo son simples y nadie los posee. Wave además tiene una arquitectura abierta que permite a otras compañÃas incorporar nuevas cosas a los waves, como llamadas de voz por la Internet, actualizaciones de Twitter, álbumes de fotografÃas y mucho más. Google espera que esta abertura aliente a una amplia acogida de los protocolos Wave, mientras que además se garantiza que la plataforma Wave no se fosilice y sea incapaz de avanzar con el tiempo, como ha pasado con el correo electrónico.
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Este es el resumen del artículo "Mejores formas de colaborar" publicado en Diciembre 12, 2009 en la revista The Economist.
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